jueves, 12 de noviembre de 2009

Medios

El problema de los medios, porque son un problema, es que se han convertido en un referente que no tiene el peso moral para comportarse como tales. El bufón, en los tiempos feudales, se ha convertido en periodista. Salvo raras y muy valiosas excepciones.

Ahora el periodista califica los actos, cualesquiera que sean, como buenos o malos, según sea quien le pague, o según sea su orientación política. Un terremoto, un deslave, como el ocurrido hace unos días, son producto de las malas políticas de un gobierno que encontró 20 años de descuido y desinterés en la población más pobre del país. Pero al periodista le interesa más ser un crítico, y que sea respetado, de todos lo que quieren hacer las cosas de otra forma.

Es duro hablar así, sobre todo porque no quiero extenderme en el comentario. Son un problema los medios de comunicación.

viernes, 6 de noviembre de 2009

El tiempo

El tiempo ha ido corriendo y yo ... no lo alcanzo. Por eso no he escrito en estos días, o meses. Pero volveremos a hacer el intento de ir poniendo estas reflexiones y observaciones dentro del poco tiempo que me queda, gracias al Gran Arquitecto del Universo. Y debo de hacerlo, puesto que tengo la necesidad urgente de escribir mis ideas y pensamientos, mis reflexiones y todo aquello que me asalta la mente.

Así que, dentro de estos días, al menos una vez por semana, seguiré escribiendo. Aunque sea solo para mi.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Amor, tiempo, retornos, ...

La vida, el tiempo, todo lo que significa el paso de cada uno de nosotros sobre esta tierra, mi paso, el paso de ella, transcurre inexorablemente hacia el infinito, la muerte, la nada, la eternidad, no lo se. Uno esperaría que todo lo que vivimos lo recordemos; pero solo recordamos lo que nos interesa, lo que fue significativo para nuestro presente. Igualmente pensamos que el tiempo, ese que transcurre como los ríos, a veces en calma, a veces en rápidos y violentos golpes a través de todas la riveras. Siempre, siempre, esperamos que controlaremos ese devenir. Amamos, y es el amor el que más recordamos