La Odisea puede interpretarse como el mítico viaje del ser humano, a través de diversas pruebas, hasta encontrar su patria y a si mismo. Una de estas pruebas es aquella en la que Odiseo llega a la Isla de Eea, patria de Circe, la hechicera. Desembarcan la mitad de los hombres que acompañaban a Odiseo y visitan a la hermosa hechicera. Ésta les da una pócima mágica y los convierte en cerdos. Pero el convertirlos en cerdos no implicaba quitarles la conciencia. Los griegos sabían quienes eran y en que se habían convertido.
Odiseo va en busca de sus hombres, pero Hermes le entrega un brebaje para que se lo tome antes de caer en las redes de Circe. Éste llega a la casa de la hechicera, tomando el mágico brebaje antes. Le sigue el juego a Circe, tomando la pócima que le ofrece y, en lugar de caer bajo su hechizo, Odiseo la amenaza a muerte para que devuelva la forma humana a sus hombres, lo que hace, logrando rescatarlos y volver a su viaje hacia Ítaca.
Hago un recuento de este pasaje porque me parece que se debe darle una interpretación actual y que nos pueda ser útil en nuestra vida como personas y como sociedad. Me parece que lo que hay que resaltar es que Circe "corrompe" a los hombres con sus encantos. Éstos se vuelven animales, pero son concientes de lo que son, animales, y sufren por ello. Pero no pueden hacer nada por revertir este embrujo. Hasta que llega nuestro héroe solar y no es corrompido por la hechicera, a pesar de haber bebido su pócima.
Estamos justo en un momento de nuestra historia en la que se nos repite esta historia. Hay muchos corruptos en nuestra sociedad. Todos están concientes de serlo, de eso no hay duda alguna. Hace falta que se vuelvan humanos para que vuelvan a su viaje en la vida y que logren completarla con éxito...
lunes, 23 de marzo de 2009
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