Un amigo mío, economista, me dijo que él había decidido estudiar economía por dos cosas. La primera, porque Mike Jagger y Arnold Schwarzenegger estudiaron economía y han llegado a ser celebridades. Y la segunda, porque un economista puede diseñar una estrategia económica y si fracasa, puede lavarse las manos explicando las razones del fracaso, que siempre su origen es externo. Incluso, se pueden hacer artículos para los periodicos en cualquier tono, citando al cantante de The Rolling Stones o a The Beatles, o bien, citando a Addams o a Marx. La cosa es que, como economista, terminaba diciendomen, tengo la posibilidad de vivir bien, media vez pueda venderme adecuadamente.
Muchas veces hemos visto entrevistas con sesudos economistas que no nos dicen nada. Dicen "si, pero no", a lo Cantinflas. Y tratan de explicar el descalabro de la economía mundial mediante sofismas que no dicen nada. Incluso, olvidan mencionar que una de las características de la economía es que no es una ciencia exacta, sino un contrato social establecido entre varias personas y que ha devenido, desde que el hombre comenzó a construir pueblos y ciudades, en esclavismo, feudalismo y capitalismo, con sus variantes propias.
El neoliberalismo partía del hecho de que un gobierno no debe meter su mano en la economía, sino que la mano invisible es la que regularía todo, abriendo el mercado a mayor competencia que beneficiaría a la gente. Cosa que, visto los resultados actuales, no es cierto, y no se puede decir lo contrario. Algunos se atrevieron a decir que la crisis actual se debió a errores que pueden corregirse; pero ahora ya no es posible repetir ese argumento.
El neoliberalismo puede estudiarse como un caso de la Tragedia de los Comunes. Solo que en lugar de que sean recursos naturales es el mercado el que está libre para convertirse en el campo de batalla. En este caso, al contrario que con los recursos, el problema radica en la codicia de unos pocos que atropellan al resto y, al final, explota la burbuja creada por dicha codicia.
Muchas veces hemos visto entrevistas con sesudos economistas que no nos dicen nada. Dicen "si, pero no", a lo Cantinflas. Y tratan de explicar el descalabro de la economía mundial mediante sofismas que no dicen nada. Incluso, olvidan mencionar que una de las características de la economía es que no es una ciencia exacta, sino un contrato social establecido entre varias personas y que ha devenido, desde que el hombre comenzó a construir pueblos y ciudades, en esclavismo, feudalismo y capitalismo, con sus variantes propias.
El neoliberalismo partía del hecho de que un gobierno no debe meter su mano en la economía, sino que la mano invisible es la que regularía todo, abriendo el mercado a mayor competencia que beneficiaría a la gente. Cosa que, visto los resultados actuales, no es cierto, y no se puede decir lo contrario. Algunos se atrevieron a decir que la crisis actual se debió a errores que pueden corregirse; pero ahora ya no es posible repetir ese argumento.
El neoliberalismo puede estudiarse como un caso de la Tragedia de los Comunes. Solo que en lugar de que sean recursos naturales es el mercado el que está libre para convertirse en el campo de batalla. En este caso, al contrario que con los recursos, el problema radica en la codicia de unos pocos que atropellan al resto y, al final, explota la burbuja creada por dicha codicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario